Teja Colonial

Aquí están algunos de los principales problemas que pueden afectar a los techos de teja de arcilla:

1. Daño por Factores Climáticos

Las tejas de arcilla son particularmente susceptibles al daño causado por condiciones climáticas extremas. El frío intenso puede hacer que las tejas se agrieten si el agua se infiltra y luego se congela. Por otro lado, el granizo puede causar fracturas o roturas en las tejas.

2. Absorción de Agua

Aunque las tejas de arcilla son conocidas por su resistencia a la descomposición, pueden absorber agua, lo que aumenta el riesgo de filtraciones y daños por heladas. Esto es especialmente problemático en climas donde las temperaturas fluctúan regularmente alrededor del punto de congelación.

3. Sobrecarga Estructural

Las tejas de arcilla son más pesadas que otros tipos de materiales para techos, como las tejas asfálticas o metálicas. Esto puede generar una carga adicional en la estructura de soporte del techo, lo que podría requerir refuerzos adicionales si el edificio no fue diseñado originalmente para soportar ese peso extra.

4. Desplazamiento y Deslizamiento

Con el tiempo, las tejas de arcilla pueden desplazarse o deslizarse, especialmente si no están adecuadamente aseguradas o si la estructura que las soporta se ha deteriorado. Esto puede llevar a huecos que permiten la entrada de agua, aumentando el riesgo de filtraciones.

5. Crecimiento de Musgo y Líquenes

En zonas de alta humedad, el crecimiento de musgo y líquenes puede ser un problema en los techos de teja de arcilla. Estos organismos pueden retener humedad contra la superficie del techo, lo que potencialmente podría causar deterioro a largo plazo.

6. Mantenimiento y Reparación Difíciles

Las reparaciones de un techo de teja de arcilla pueden ser más complejas y costosas en comparación con otros tipos de techos. Encontrar tejas que coincidan y manejarlas sin causar daño adicional puede ser un desafío, especialmente en techos antiguos o en aquellos donde el modelo de teja ya no está disponible.

Soluciones Preventivas

La mejor manera de manejar estos problemas es a través de la prevención, que incluye inspecciones regulares, limpieza de tejas para evitar el crecimiento de musgo y líquenes, y la reparación o el reemplazo de tejas dañadas o desplazadas tan pronto como se identifiquen. También es fundamental asegurarse de que el sistema de drenaje del techo, incluyendo canaletas y bajantes, esté libre de obstrucciones y funcione correctamente.